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miércoles, 9 de mayo de 2012

MIS 23 PARA LA EURO

Esta lista es, en mi opinión, la que llevará Vicente del Bosque a la Eurocopa. En ningún caso sería la que yo haría porque metería por donde fuese a Muniaín, Pedro y Juanfran.
 
Guardametas
Victor Valdés    (F.C. Barcelona)
José Manuel Reina    (Liverpool F.C. )
Iker Casillas   (Real Madrid C.F.)
Defensas
Álvaro Arbeloa   (Real Madrid C.F.)
Raúl Albiol  (Real Madrid C.F.)
Sergio Ramos   (Real Madrid C.F.)
Gerard Piqué   (F.C. Barcelona)
Andoni Iraola   (Athletic Club)
Jordi Alba   (Valencia C.F. S.A.D)
Javi Martínez   (Athletic Club de Bilbao)
Centrocampistas
Xavi Hernández   (F.C. Barcelona )
Andrés Iniesta   (F.C. Barcelona )
Cesc Fábregas   (FC Barcelona)
Xabi Alonso   (Real Madrid C.F.)
Sergio Busquets  (F.C. Barcelona)
Santi Cazorla  (Málaga CF SAD)
Thiago Alcántara  (FC Barcelona)
Delanteros
David  Silva  (Manchester City F.C.)
Jesús Navas   (Sevilla C.F. S.A.D.)
Roberto Soldado   (Valencia CF SAD)
Fernando Llorente  (Athletic Club de Bilbao)
Álvaro Negredo   (Sevilla F.C. S.A.D. )
Juan Manuel Mata  (Chelsea CF)
@joanfelizz

martes, 30 de agosto de 2011

Míster


De la palabra duelo me quedo con la tercera acepción que da la RAE, “pundonor y empeño de honor”, dos palabras, dos maneras de erigir la soledad como modo de vida.

Hablemos de duelos, tenemos donde elegir, Senna-Prost, Menotti-Bilardo, y si seguimos acercándonos cronológicamente y dirección banquillos, se nos ocurre pensar en Mourinho-Guardiola, un poco advenedizo quizás. Vivimos momentos convulsos en nuestro Clásico particular, el esférico se sale de plano y la polémica corre la banda. Reflexionando, y evitando pasar la red con un golpe certero como si de tenis se tratara, recordé una película que vi hace tiempo, “The Damned United”. Don Revie-Brian Clough, Leeds United-Derby County. Es una restrospectiva cuasi-perfecta. Finales de los 60’s, principios de los 70's, gradas de madera, futbolistas fumando antes del partido, barro, camisetas de algodón, más barro, jugadores aguerridos y “non-educated”, y finalmente barro.

Eran tiempos en los que el Leeds United ejercía de poder hegemónico en el fútbol británico, todos los rotativos y tabloides miraban hacia Elland Road, los titulares rezaban vítores. Europa entera sabía que ese equipo que vestía de blanco, solamente al principio de los partidos, ganaba y ganaba siempre, pero ¿cómo lo hacía?. Su entrenador, Don Revie, preparaba sus partidos desde la trinchera, su objetivo no residía solamente en ganar sino en aplastar. El balón los evitaba, el césped los acariciaba y los contrarios los temían.

En la Championship div. un equipo humilde, del norte, de acento “complicado”, el Derby County, entrenado por Brian Clough, un tipo que más tarde ganaría dos Copas de Europa con el Nottingham Forest. Irreverente, engreído, ególatra y solo, con su “inseparable” ayudante Peter Taylor, pero solo, él y su whisky, el único que realmente lo derrotó. Creía en unas ideas y las llevó hasta su final, como su tupé elvisiano. Acompañado de sus ideas y un equipo que creyó en él, llegó a ser el mejor equipo de la isla. Su error fue creer que no ganaba el título sino que estaba derrotando a su gran rival, Don Revie. Revie fue su antónimo, dentro y fuera del campo.

Es ahí donde impera la soledad del fútbol, la soledad del entrenador, el “empeño de honor”, no por alcanzar victorias sino por hacer acreedor de la derrota a tu rival. El fútbol nació como espectáculo, en Inglaterra por cierto, y sus integrantes, algunos, se han ido encargando de dinamitar su esencia. Pura y limpia como las indumentarias saliendo por el túnel, se ha ido enfangando por el empeño de algunos en convertir “su” fútbol como algo personal, en encumbrar la derrota y disimular la victoria. Afortunadamente, hoy en día, tenemos ejemplos muy cercanos que magnifican la forma y dilatan el fondo.

@DamenAlonso

sábado, 27 de agosto de 2011

Consecuencias del "lockout".

Al finalizar el curso pasado con la victoria de los Mavericks de Nowitzki frente al big three de los Heat, se consumó lo que temíamos. La NBA entraba en cierre patronal, el comentado y hablado lockout. Para los amantes del buen baloncesto es una nefasta noticia que obliga a estar a la expectativa, en busca de alguna noticia que te de luz y convierta la desolación y el pesimismo en optimismo.

El dichoso lockout no permite entrenar ni utilizar ninguna de las instalaciones a sus estrellas, además de dejar los contratos en suspenso, por lo tanto, no ven ni un euro. El desenlace de esta medida no ha sido otro que el de siempre, el dinero. Las franquicias dejaron constancia de que tenían pérdidas monstruosas y declararon el cierre, apuntando como medida ha desbloquearlo una rebaja sustancial de los contratos de sus estrellas. Los jugadores, por su parte, no han pasado por el aro, escudándose en que los ingresos por televisión y las audiencias han sido más elevados este curso, superando en muchos casos la previsión que manejaban las franquicias. A las dos partes les interesa llegar a un acuerdo, están obligadas a entenderse. A las primeras porque las pérdidas serán mayores si el curso no comienza, además, en periodo lockout no pueden reforzarse, y las estrellas no quieren estar paradas, más motivo si sus contratos están en la misma situación, sin ingreso no hay paraíso. Lo cierto es que llevan dos meses de reuniones y el acuerdo no llega. Aunque las últimas noticias informan de que el acuerdo está cerca. Grata noticia.

Mientras las reuniones siguen, algunos jugadores ya han hecho las maletas rumbo a Europa. Los clubes europeos y asiáticos han visto en ellos grandes refuerzos. Aunque China ha vetado a las estrellas, no han dejado de mostrar interés en contratar a alguna de ellas. Pero ¿vale la pena?

En principio, puede y es un salto de calidad enorme para los equipos, se refuerzan con jugadores de la mejor liga del mundo. Sin embargo, hay varios inconvenientes. Uno de ellos es el seguro médico, los jugadores en periodo lockout carecen de seguro y el coste del mismo es muy caro para cualquier club. Y el más importante, la cláusula de regreso a la NBA. Los jugadores están locos por la música, ganan un dinero durante el cierre y siguen compitiendo. El problema viene cuando el periodo lockout termina. Ellos vuelven a sus equipos NBA y dejan un vacío importante en el puesto que habían cubierto durante este tiempo.

De verdad, ¿los equipos están dispuestos a perder a un jugador importante a mitad de temporada?
No lo creo, los clubes con grandes aspiraciones en sus ligas domésticas y la euroliga no pueden permitirse perder a un titular a media temporada. A continuación, tenemos una lista de algunos jugadores que jugarán en Europa durante el cierre patronal:

- Deron Williams (base de New Jersey Nets): El jugador de 27 años ha fichado por el Besiktas turco y anima a las estrellas que sigan su paso.

- Rudy Fernández (escolta de Dallas Mavericks): El mallorquín fichó por los actuales campeones y acaba de firmar por el Real Madrid. Cuesta creer que no vuelva a la NBA cuando termine el cierre.

- Ty Lawson (base de Denver Nuggets): El base ha fichado por Zalguiris Kaunas que acompañará a Sony Sweems, escolta de los Raptors de Calderón.

- Rasual Butler (alero de los Bulls): El alero de Chicago ha fichado por el Gran Canaria de liga Endesa.

- Reggie Williams (escolta de los Warriors): El escolta jugará con el Caja Laboral de Dusko Ivanovic.

- Sasha Vujacic (base de New Jersey Nets): El excompañero de Pau Gasol y marido de Sharapova jugará en el Efes Pilsen.

- Timofey Mozgoz (pivot de Denver Nuggets): El ruso de 2.16 jugará en el Khimki ruso.

- Wilson Chandler (alero de Denver Nuggets). El alero estadounidense jugará en el Olimpia Milano de Scariolo.

@Guillecoliseo10

lunes, 22 de agosto de 2011

Huelga

La AFE convocó una huelga para la 1º y 2º J. de Liga, una huelga apoyada por todos los futbolistas de 1ª y 2ª división.

Uno de los motivos fundamentales es que la LFP genera ingresos cuando hay clubs que tienen deudas con sus trabajadores y con instituciones como S.S. o Hacienda, lógicamente los jugadores quieren que los clubs cumplan con los contratos firmados.

Lo que es inconcebible en un país donde se dice o decimos que es la mejor liga del mundo los clubs tengan unas deudas desorbitadas, estas deudas son consecuencia de la mala gestión de los dirigentes.

Recuerdo que cuando los clubs de fútbol se convirtieron en S.A.D. era para que no existieran deudas y para que estuvieran saneados pero no es así.

Las deudas asolan al fútbol español y una vez que los clubs presentan el concurso de acreedores, la mayoría, se acogen a la Ley Concursal para sortear los descensos de categoría, la desaparición o incluso los pagos pendientes, todo ello amparado por la legislación vigente.

Es inaudito que los actuales gobernantes permitan esas atrocidades y pienso que deberían intervenir.

Algo similar ocurrió en el fútbol alemán en la década de los 90 y la intervención gubernamental permitió a los clubs sanearse cumpliendo con las estrictas normas impuestas por las autoridades pertinentes. Los clubs no solo se sanearon sino que pusieron a funcionar sus canteras, obligados por la Federación Alemana y el Ministerio de Deportes, los resultados y los frutos los están recogiendo en los últimos años.

La solución pasa por hacer cumplir a los clubs con sus obligaciones; pago a las administraciones correspondientes, pago a sus trabajadores, pago de las compras que realizan... y todo declarado y controlado.

¿Por qué en un fichaje de 45 millones de euros, cuántos llegan al club? Un ejemplo; en el año 2000 el Madrid ficha a Flavio Conçeiçao procedente del Deportivo por 24 millones de euros, de esos 24 millones 2'4 fueron para el jugador en el momento de la firma, lo celebró en un local de moda, y otros 2'4 millones fueron para su representante, Lito Míguez.

La solución pasaría por imponer un límite salarial o algo similar, por un reparto equitativo de los derechos televisivos, pero principalmente por un control de la gestión de los presidentes que en muchos casos es pésimo, en la mayoría de los casos usan el club para beneficio propio.

En esta primera jornada los grandes perjudicados fuimos nosotros , los aficionados, porque nosotros pagamos religiosamente, porque compramos los diarios deportivos o los leemos, porque vemos los partidos por la tele, porque somos los que verdaderamente sustentamos todo este mal negocio llamado FÚTBOL.

Pienso que el problema del fútbol español no tiene solución y pienso que va para largo y si no intervienen las consecuencias en muchos casos serán irreparables y terribles.

P.D; existen otros deportes que también se han visto afectados por malas gestiones; fútbol-sala, baloncesto y balonmano, entre otros.

viernes, 19 de agosto de 2011

El fútbol moderno, ese al que tanto se odia actualmente.

Soy Marco Díaz (@MarcoDiaz87 en twitter) y junto con @Damenalonso @enekosertucha @DaniGM87 @joanfelizz @GuilleColiseo10 o @DeCalcetin entre otros, los cuales también nos ayudarán, hemos creado este blog para hablar de nuestras inquietudes deportivas. Trataremos de hacerlo desde la mayor objetividad posible y tocando temas de actualidad pero también intentaremos ir por poco más lejos de la noticia. Hablar de aspectos que la prensa deportiva actual suele pasar por alto, como pueden ser sensaciones, sentimientos e intentar entender mejor cada deporte desde algún punto de vista un poco más técnico. También hemos de decir que si quieres participar en este blog, si crees que tienes algo que aportarnos, estamos abiertos a cualquier tipo de participación.

Como veis, @joanfelizz ha estrenado el blog. No veo una mejor forma de hacerlo, magnífica su entrada. Muy del hilo de lo que queremos conseguir, ir más allá de polémicas, de análisis simplistas y superficiales que estamos acostumbrados a ver.

Ya hablando del tema a tratar: El fútbol moderno, ese al que tanto se odia actualmente, me voy a referir al impacto de un descenso dentro de un equipo e incluso de su afición o su ciudad.

Durante toda la historia, el descenso fue uno de los “palos” más duros para un equipo. En la actualidad lo es, si cabe, aun más. Además del impacto sentimental y deportivo que durante toda la historia ha golpeado a estos equipos, ahora tenemos que unir el peligro económico que corren estos equipos.

Comenzaré hablando del impacto sentimental ya que lo tengo bastante reciente. Algunos de vosotros lo sabréis y otros no. Soy del Dépor y este año hemos descendido. Soy lo suficientemente joven para no saber lo que es ver a mi equipo descendiendo o jugando en 2ª división. Teniendo en cuenta que siempre hablamos en un contexto deportivo, es de lo más duro que me ha ocurrido en mi vida (repito, deportiva), junto con alguna derrota personal importante. Sobre esto escribí en la página de los amigos de www.riazor.org unos días antes de que el partido de la última jornada nos mandara a 2ª división: http://www.riazor.org/ser-de-los-que-ganan-es-muy-facil-ser-del-deportivo-me-parece-mejor-1016007 . Supongo que leyendo esto os podéis imaginar (los que no os ha pasado nunca) lo que sentimos los seguidores de equipos “pequeños” que aun encima, hacia menos de 10 años estábamos a un paso de una final de Champions. De todos modos, hay muchas formas de reaccionar. La que, bajo mi punto de vista, es la adecuada es la de seguir apoyando al equipo, si cabe, más que antes. Es en estos momentos cuando más hay que demostrar el cariño por unos colores para estar lo menos posible en una categoría en la cual todos los aficionados creemos que nuestro equipo no debe estar. Debemos hacer que ese dicho atlético de “un añito en el infiermo” sea solo eso, un añito.

El impacto deportivo es evidente: pérdida de potencial deportivo, “huida” de jugadores y un claro paso atrás en una, supuesta, planificación deportiva a medio-largo plazo. Para hacer frente a esto también hay varias formas de afrontarlo. En este caso hay que tener la cabeza muy fría y saber en donde te metes. La 2ª división no es igual que 1ª, eso es tan obvio que no todo el mundo se para a pensarlo. No es cuestión de volverse loco, hacer grandes inversiones para fichar a “cracks” y con ello poner en peligro el futuro a medio-largo plazo. Saber moverte en el mercado, apelar a sentimentalismos (el ejemplo de Xisco con el Dépor es, incluso, excesivo). Fichar jugadores experimentados pero con inquietudes, fichar un entrenador que no esté acomodado y que tenga altos objetivos ayudará a que el equipo no entre en una espiral de victimismo y pesimismo. Además de esto, hacer un equipo que haga ilusionar a los socios, que movilice a una ciudad que, recordemos, necesita que su club esté en primera. También es importante ser rápidos en la planificación, si no consigues volver a la categoría superior en 1 o 2 años, luego será complicadísimo. Estamos en una época donde el tema económico, que luego trataremos, es importantísimo y pasar unos años en 2ª división afecta negativamente en lo deportivo y económico (Véase Tenerife, Celta, Atlético –al cual le costó sangre y sudor subir-, Betis, etc.)

Por último queda el tema más delicado: el económico. Gracias a la lucha de algunos dirigentes, algunos equipos al descender cuentan con un seguro con el cual pueden hacer frente a las dificultades que se afrontan tras bajar de categoría. De todos modos, tal y como está montado el citado “fútbol moderno” esto no parece sostenible aun contando con el seguro. Muchos de los equipos que bajan de categoría corren el riesgo de bajar de nuevo de categoría, de no recuperarse o incluso de desaparecer. Sin ir más lejos, este último año ha bajado a 2ª B un histórico como el Tenerife. Otros equipos han desaparecido o bajado de categoría por motivos de dinero (Oviedo, por ejemplo). Bajo mi punto de vista es intolerable, bien si la culpa es una mala planificación como si la culpa es de unos estamentos más altos.

Sea como sea hay que salvar el fútbol y el deporte en general de hacia donde se está dirigiendo. Hay que cambiar el rumbo hacia una competitividad sana, como antaño, donde el dinero pase a un segundo plano y se le dé importancia a los sentimentalismos y al aspecto deportivo, que es de lo que se trata.

@MarcoDiaz87

LA AUTORIDAD MORAL

Cualquier amante del deporte, alejado de prejuicios económicos y respuestas materiales, conoce las palabras mencionadas en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres de 1908 por parte del barón Pierre de Coubertain: “Lo importante no es ganar, sino participar”
Esta esencia del deporte ya no existe. Me encuentro frustrado ante mi condición de maestro/educador. Nos postramos ante un grupo de alumnos y les presentamos unos valores que intentamos descubrirles y que, incluso, evaluamos. Salen del escenario de la escuela y se topan con una sociedad hipócrita que no responde a aquello que luchamos a diario por enseñarles.
Esa autoridad moral que tardamos meses, quizás años, en ganarnos, se derrumba y pasa a manos de poderosos millonarios que salen en televisión y usan las armas de su fama para convertirlos en marionetas de su estilo.
El deporte de espectáculo es avaricioso, engendra intereses personales y económicos por todas sus arterias. Poco importa lo que se transmita si es rentable. Prefieren darse de hostias antes de mostrar su humildad y respeto. Se ausentan cuando sus objetivos no se cumplen. Pero me resigno a no señalar a los responsables. Mi inquietud por luchar por un mundo mejor y, por lo tanto, con un deporte mejor, no me permite dormir la mona y esperar al siguiente día para cuando ya se me haya pasado la borrachera. No.
Desde casi siempre, sólo utilizo los medios de comunicación para disfrutar del deporte. Soy crítico con casi todo lo demás que se emite. Intento dominar al medio. Eso sí, salvo a la radio, fiel amiga. Comencemos por ir señalando a algunos de mis culpables. Los medios deportivos se han convertido en unos estrategas fundamentalistas donde interesa más si Cristiano ha salido de fiesta que Nadal entrene horas para mejorar cada día. Es más importante mentir sobre fichajes que venden periódicos que criticar a intermediarios que están destruyendo el fútbol. Interesa más saber si la Cope ha fichado a Paco González que buscar periodistas de calidad. Y eternizaría el texto poniendo ejemplos.
Señalo con el dedo de frente a personas como Florentino Pérez; vacilones del señorío, eterno “perdonavidas”, empresario respetado, poderoso adinerado, actor de lujo ante la prensa, vanaglorioso de los buenos modales… pero cómplice de un modelo. Sí. Un modelo materialista, con un precio indescriptible, donde se olvida la esencia del barón antes mencionado. Sus medios no tienen escrúpulos. Es un valiente que se atreve a hacernos creer que él tiene tanto poder que eso le hace libre para ganarlo todo.
Y tiene el descaro de entregar su club a un señor que presume de ser buena persona en la intimidad llamado José Mourinho. Un extraterrestre de la educación. Un señor sacado de libros mitológicos con un poder sobrenatural que influye directa e indirectamente en los que le rodean y en los que no. Tiene la capacidad de desmenuzar más de cien años de historia del club más laureado del mundo y, por desgracia, ha conseguido que vea ciertos partidos con una agresividad que me desconozco. De ahí que denuncie su eficacia devoradora.
Y sobre personajes como éste amamantan “Pepes” y “Marcelos” que se creen su evangelio. Y salpican a “Casillas” y “Ramos” estandartes de una selección modélica que ha laureado sus éxitos apoyados en un fundamento protagonizado primero por la persona, antes que el deportista.
Y a esta gente hay que desmascararla. No hay que tener miedo de ellos. Son culpables de derrocar autoridades morales que cuestan demasiado construir. Si queremos un mundo mejor, más tolerante, donde reine el respeto… debemos eliminar del escenario a personas como estas. Hoy día existen demasiados medios para manifestar nuestro malestar. Usémoslos. Gritemos sin pudor que no nos gustan, que estropean nuestro deporte y desvían la educación de nuestros futuros.
Si por algo me siento tan defraudado hoy es porque amo el deporte. Porque creo que es un vehículo perfecto para formar en valores, porque veo en él un motor muy potente para educar personas y no permitiré, en la medida de mis posibilidades, que unos cuantos poderosos me jodan la autoridad moral de mis niños.